Visita a la Central Térmica - Ecobarrio de Vallecas - Heat District

Ayer, gracias a los desvelos de la EMVS, visitamos la central de recogida de residuos y la central térmica que proporciona electricidad y energía para calefacción y agua caliente sanitaria a todo el barrio.

En contra de lo pudiera parecer en un principio, las dos instalaciones son independientes. Los gases producidos por las basuras no serán utilizados para generar energía, aunque se está en conversaciones con el vertedero de Valdemingómez para utilizar biogás.

La recogida neumática de basuras conecta cada bloque con la central. Tenemos que reservar un espacio en nuestro edificio donde colocar los buzones y el cuarto de recogida en la parte inferior (de unos 5,00 x 2,50 m, como una plaza de garaje). Obviamente el óptimo diseño de nuestro proyecto nos permite disponer no de uno, sino de dos cuartos de recogida (o uno el doble de grande) que es exactamente la dotación necesaria, pues el tamaño anterior es válido para 50 viviendas.

Se recogerán residuos orgánicos y envases; vidrio y papel no, así que seguirá habiendo contenedores en la calle. Y se utiliza una única tubería, un ingenioso sistema de compuertas (no tan ingenioso porque a mi se me había ocurrido la misma solución) permite recoger la fracción de residuos que queramos.

La fracción de basuras orgánicas se prensará. -Es una pena que además de prensar la basura no la incineren, así podrías deshacerte de las pruebas del delito- le comenté a Rubén. Aunque, por lo visto se llevará un control sobre que tira cada bloque y ya sabemos que los forenses pueden encontrar ADN de cualquier resto. Así que, de momento, seguirá enterrando los cuerpos en el jardín.

Posteriormente visitamos la central térmica, que se divide en una sala de calderas de condensación convencional, pero más grande y unas pilas de combustible, que indignó, por su supuesta violación de la leyes de la física, a aquellos que fueron educados en el supersticioso sistema pre LOGSE, donde les enseñaron a adorar a las leyes de la termodinámica como si fueran dioses.

Lo que entendí fue lo siguiente: se extrae el hidrógeno contenido en un gas (biogas o gas natural) y del agua y por un proceso químico que produce electricidad se combina con oxígeno para volver a producir agua, agua caliente. Por cierto la extracción del hidrógeno a partir del gas genera CO2, así que el proceso no es tan sucio, pero tampoco limpio del todo.

Yo, que me he liberado de las falsos ídolos que subyugan a la generación anterior, me pregunté si es la misma reacción que se produce en el sol.

-Por supuesto que no- replicó Rubén -en el sol se produce la fusión del hidrógeno.
-Una bomba de hidrógeno-helio- añadió Sergio.
-¿Y cómo sabéis que las estrellas están formadas por hidrógeno?
- Por la cromatografía de gases.
- ¡Ya! magia.

Después de una conversación sobre la física tan gratificante, Kattalin abandonó la visita y nos explicaron en que afecta todo esto a nuestros proyectos. Básicamente tenemos que disponer un intercambiador de placas tras la acometida del edificio y un módulo que regula y tarifa el consumo de energía a la entrada de cada vivienda. Este módulo está formado por racorería loca, palabra que desconocíamos, pero que se ha incorporado desde entonces con fuerza a nuestras conversaciones.

Por cierto, como gran exclusiva, podemos anunciar que nuestro bloque será el único que dispondrá a la entrada de cada vivienda los contadores de agua fría , que mandarán la lectura electrónicamente. Este sistema ahorrará en montantes y cuartos de contadores y hará de nuestro edificio un pionero en el campo de las instalaciones. ¡Hurra!

Pero, después de tan gratas noticias y apasionantes experiencias, vino la bronca. La EMVS nos instó a firmar de una vez el contrato, así que debemos decidir ya que tipo de sociedad vamos a formar para elaborar el proyecto. Y ante las acusaciones contra Emilio por falta de interés al no haber venido a la visita, Dani se hizo pasar por Emilio, como alto comisionado del grupo.

Mientras tanto, fuera de la central, hacía calor, pero el espacio que queda bajo las chimeneas resulta muy agradable. Si hubiera bancos donde poder sentarse y una terraza en la que pedir bebidas sería un gran centro de reunión en el barrio.

Después estuvimos compartiendo impresiones en la cervería los Changos, donde sonaba "todos los días son días de fiesta". Ya veremos, si es verdad.